LLAGUT BENIFALLET
Benifallet es un pueblo junto a un río que abre caminos y crea vínculos
Descubre el poder cautivador del río Ebro
El Ebro, gran corredor de comercio y comunicación, ha sido una arteria vital que ha enriquecido el territorio a lo largo de la historia. Desde las sociedades ibéricas hasta los romanos, este majestuoso río ha impulsado la economía y la cultura de sus riberas, beneficiando no sólo a los dirigentes sino también a todos los pobladores.
Este río siempre ha sido una puerta de entrada a la península, con tierras fértiles que se convertían en la base de la organización de la retaguardia. A pesar de ello, no llegó a unir completamente los territorios ocupados por diversas tribus como los cántabros, autrigones, várdulos, berones, vascones, ilergetes, edetanos e ilercavones, lo que explica las grandes diferencias históricas, políticas y sociales entre las zonas por donde fluye el Ebro, desde su nacimiento en Cantabria hasta su desembocadura en el Delta.
Imagina a los temibles vikingos navegando río arriba para devastar Pamplona en el siglo IX, o las embarcaciones y chalanas musulmanas de la Marca Superior de al-Andalus cruzando sus aguas. El Rey Alfonso I el Batallador también utilizó este río para reconquistar el Bajo Ebro, y los primeros monarcas de la Corona de Aragón viajaron por sus aguas. Incluso, el Ebro fue testigo del primer peaje fluvial de Europa durante los primeros años de la reconquista cristiana, un tributo para todos los mercaderes que transportaban mercancías por el río.
A lo largo de los años, el Ebro ha sido un camino lleno de vida, con navegantes fluviales, raqueros, transportistas, pescadores y calafates. En el siglo XX, ingenieros, financieros y visionarios soñaron con convertir el Ebro en la gran vía de navegación entre el Mediterráneo y el Cantábrico, y muchos proyectos de canalización y navegación vieron la luz, como la navegación en vapores desde el mar hasta Escatrón y Sástago (Zaragoza).
Aunque estas grandes obras no tuvieron el éxito esperado, la navegación tradicional continuó. En las aguas del Ebro navegaban los preciosos llaguts, cargados de trigo, vino, yeso o carbón en dirección al mar, mientras los raieros catalanes descendían río abajo. El Ebro no solo ha conectado territorios, sino que también ha unido personas a través de la música y el arte, como demuestra la Jota, que resuena desde Navarra hasta las tierras del Ebro, la artesanía de los llaguts, la vestimenta o muchas recetas gastronómicas.
La modernización del transporte con el ferrocarril y la mejora de las carreteras, junto con la construcción de grandes embalses como los de Mequinenza y Ribarroja, pusieron fin a esta tradición milenaria. Pero hoy tenemos la obligación de recordar, reivindicar y recuperar este legado para las generaciones futuras, manteniendo viva la identidad que nos define.
Historia
Los llaguts fueron los últimos transportes fluviales de mercancías. Eran el resultado directo de una lenta evolución desde el esquife romano, pasando por el leño medieval, cogiendo lo más apropiado de cada uno. Su presencia en el Ebro era numerosa hasta la aparición de medios más rápidos de transporte por carretera. Una vez cargado, se subía el encuentro y se iba bajando a golpe de remo y con la ayuda de la corriente del río. Su tripulación la componía un patrón, dos peones y el mulero. Era habitual ver llaguts cargados con vino o algarrobas de Benifallet, cerámica de Miravet o carbón de Mequinenza. Para su construcción se bajaba madera de abeto de los Pirineos por el simple, pero importante, motivo que no tenía nudos y facilitaba su trabajo en los calafates. El desarrollo y mejora de la red de transportes terrestres, y la construcción de los embalses de Ribarroja y Mequinenza, provocaron la desaparición definitiva de la navegación fluvial comercial a finales de los años 60 del siglo XX. Sin embargo, Benifallet mantuvo una barca de paso hasta 1991.
El actual Llagut Benifallet intenta ser una réplica de esos antiguos llaguts que tantos años se estremecieron por el Ebro. Tiene una capacidad de 47 pasajeros y tiene un recorrido regular aguas hacia el cruce de las comarcas del Baix Ebre, la Terra Alta y la Ribera d’Ebre, de una hora, aunque ofrece también viajes hasta el ‘ embarcadero del Castellot de la Roca Roja y hasta Miravet (consultar los requisitos).
Sus dimensiones son de 15m de eslora y 3,5m de manga. Ha sido diseñado por ingenieros navales de la empresa Proname y construido en un taller de Móra la Nova.
Antiguo paso de barca
Paseando por la orilla del río, desde el Parque de las Moreras, se llega al que fue el antiguo embarcadero de la barcaza con la que la gente de Benifallet cruzaba el río para trabajar las tierras de al otro lado, ir a trabajar a las minas de El Pinell de Brai o a buscar el tren en la antigua estación de la Val de Zafán.
Esta estructura singular consistía en una plataforma flotante anclada a un cable transversal que conectaba ambas orillas.
La barcaza se mantenía estable gracias a un sistema de poleas que se deslizaban a lo largo de una cuerda robusta, tradicionalmente hecha de cáñamo o pita. La barcaza contaba con un barquero experto en la navegación fluvial, el llagutero, dedicado a su tarea desde el alba hasta el atardecer. Aunque los usuarios habituales a menudo colaboraban, era el barquero quien se encargaba de fijar la barcaza a los embarcaderos o ‘puentes’, que disponían de un mecanismo de cadenas ajustables para adaptarse a las variaciones del nivel del agua.
La estructura del embarcadero estaba diseñada con dos ganchos en el extremo que tocaba en el río, donde se sujetaba la barcaza con cuerdas o cadenas. Las barcas, formadas por dos llaguts de 25 a 35 toneladas, se disponían en paralelo separados por unos tres metros, y sobre ellos reposaba una plataforma cuadrada de madera, construida con tablones unidos por pasamanos de hierro, que finalmente se anclaba firmemente a los lados de los llaguts.
Homenaje a los pasos de Barca de l'Ebre
Recordando el pasado y honrando nuestra historia con este mural del artista inglés Paul Curtis , más conocido como Moose y reconocido a nivel internacional por su técnica de Reverse Graffiti, en el antiguo paso de barca de Benifallet.
Este sitio fue vital para nuestra economía y vida diaria hasta que se construyó el Puente del Llaguter en 1991.
Ahora, revivimos esos momentos y creamos riqueza en nuestro pueblo a través del turismo. Ven a descubrir nuestro patrimonio.
Escanea el QR que encontrarás junto al mural para acceder a toda la información sobre los diferentes pasos de barca que ha habido en el tramo sur del Ebro.
Opiniones de Clientes
"El paseo con el Llagut de Benifallet ha sido una experiencia inolvidable. La tranquilidad del río y la belleza del paisaje me cautivaron desde el primer momento. El guía era muy conocedor de la historia y la naturaleza de la zona, hecho que enriqueció mucho la visita. ¡Ideal para familias y amantes de la naturaleza!
"Me quedé impresionado con la calidad del servicio y la amabilidad del personal. El paseo en Llagut es una manera fantástica de descubrir los encantos del río Ebro y sus alrededores. Las explicaciones sobre la flora y fauna locales fueron muy interesantes y didácticas. Sin duda, ¡lo recomiendo a todo el mundo!"
"Como amante de las actividades al aire libre, el Llagut de Benifallet cumplió todas mis expectativas. Las vistas son espectaculares y el paseo es muy relajante. Además, la historia de los antiguos llaguts y su importancia para la zona es fascinante. Un plan perfecto para desconectar y disfrutar de la naturaleza."
"Fui con un grupo de amigos y nos lo pasamos genial. El paseo con Llagut es muy agradable y el paisaje es precioso. El guía era muy simpático y nos explicó muchas curiosidades que desconocíamos. También tuvimos la suerte de ver diferentes pájaros acuáticos. ¡Una experiencia muy recomendable para todos!"
Oficina de Turismo de Benifallet
Av. Lluís Companys, 6 – Benifallet
HORARIO
- TEMPORADA BAJA | De lunes a viernes, de 9 a 14 h.
- TEMPORADA MEDIA (Semana Santa hasta San Juan) | De lunes a viernes, de 9 a 14 h. y los fines de semana y festivos, 10 a 13:30 y de 15:30 a 18:30 h.
- TEMPORADA ALTA (junio – septiembre) | De lunes a domingo, de 10 a 13:30 h y de 15:30 a 18:30 h.






