El Castillo de Benifallet, situado en una posición estratégica, ha sido testigo de diversas épocas históricas. Se cree que sus primeras construcciones se remontan a la época islámica, aunque los restos visibles podrían corresponder actualmente a posteriores modificaciones y reutilizaciones de la estructura original. Durante la Edad Media, el castillo jugó un papel importante en la defensa del territorio. Su elevada ubicación permitía controlar los accesos al pueblo y ofrecer una vista panorámica del valle del río Ebro, un punto crucial para la defensa y el control de la región. Las estructuras del castillo, aún por excavar y estudiar completamente, prometen revelar más detalles sobre la vida en la fortaleza y sus funciones a lo largo de los siglos. Aunque el tiempo y las actividades humanas han borrado muchas de sus características, los restos hallados hasta ahora ofrecen una fascinante visión de una época pasada. El yacimiento arqueológico del Castillo de Benifallet es un testimonio viviente de la rica historia de la zona, esperando futuras investigaciones para desvelar todos sus secretos y contribuir al conocimiento de nuestro pasado. Fue declarado BCIN el 22 de abril de 1949 con el número de Registro 792-ZA
Este yacimiento, aún sin una intervención arqueológica confirmada, se encuentra en la colina más alta del sudeste del casco urbano de Benifallet. Esta colina, desde los años cincuenta del siglo XX, se ha utilizado para terrazas de cultivo, provocando movimientos de tierras significativos. En agosto de 2023, el Grupo de Trabajo de Castells organizó una visita para examinar la ubicación y el estado de los restos del castillo, hasta entonces desconocidos. Durante la visita, se identificaron distintos elementos que podrían corresponder al castillo. Estos elementos se encuentran integrados en edificios que aprovecharían las antiguas cimentaciones. Algunos de estos edificios se encuentran en estado de ruina y abandono, con basura y escombros de derribo en el interior. El tejado está caído y sólo se conserva parcialmente el pavimento del piso superior en algunas partes, a pesar de estar medio derrumbado. Otros edificios, en mejor estado de conservación, parecen utilizarse como despensa o almacén. La base de cimentación de estos edificios sugiere que podrían haber reutilizado elementos de una construcción más compleja y de mayor entidad. La esquina de algunos de estos edificios está formada por sillares rectos, bien perfilados, que se asientan directamente sobre la roca madre, utilizando un mortero de cal con fragmentos cerámicos de diversas épocas. A lo largo de estas esquinas, se puede ver el arranque de un dintel de puerta con restos de las bisagras de hierro. En dirección al río, existe un conjunto de sillares bien alineados que podrían formar parte del sistema defensivo del pueblo.
Imágenes extraídas del Inventario del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico de Cataluña .
Una escapada a Benifallet es una oportunidad única para conectar con la naturaleza y la historia de nuestro pueblo. Ven y disfruta de todo lo que te ofrecen las Terres de l'Ebre.
Av. Lluís Companys, 6 – Benifallet
